Ryuichi Sakamoto
«Su frase latina favorita, “Ars longa, vita brevis”, cobra hoy todo su significado: la vida le fue breve a Ryuichi Sakamoto, pero a la longevidad de su arte cuesta imaginarle límite.»
Fernando Neira (El País)
El pasado mes de marzo fallecía Ryuichi Sakamoto, seguramente el músico japonés más conocido en Occidente, lo cual dice mucho de su prestigio e influencia. Precoz y superdotado, su actividad artística no se limitó a la composición y la interpretación, sino que ejerció también de productor, escritor, actor o cantante. Además destacó en su faceta de activista medioambiental, sobre todo después del desastre nuclear de Fukushima en 2011.
«Durante casi 45 años, Sakamoto hizo practicamente de todo. Y como es lógico en una producción tan nutrida, siempre hay discos absolutamente imprescindibles y otros que quizá no revistan tanto interés. De los discos netamente pop a los más minimalistas hay todo un universo en el que caben decenas de bandas sonoras, colaboraciones notables, discos académicos, electrónicos, ambientales, experimentales y más.»
Juan Carlos Ballesta (Revista La Dosis)
En 1978 se publica el primer trabajo de Yellow Magic Orchestra, con Sakamoto a los teclados. La banda, que adopta como referente a los alemanes Kraftwerk, está considerada como una de las pioneras de la música electrónica. Sus composiciones innovadoras y experimentales son precursoras del tecno que arrasará a principios de la década de los 80. La experimentación será una constante durante la carrera del artista nipón, moviéndose con soltura entre el pop electrónico más generalista y el minimalismo más vanguardista. Durante estos años colaboró con numerosos artistas de diversos estilos, sobre todo con su habitual David Sylvian.
Una de las facetas más destacadas de Sakamoto es la de compositor de bandas sonoras. Su debut se produce en 1983 con Merry Christmas Mr. Lawrence, donde aparece además como actor (a recordar la famosa escena del beso con David Bowie), y con la que consiguió un premio BAFTA. Sin duda su obra más aclamada es la música para El Último Emperador (1987), que fue galardonada con el Oscar, un Grammy y el Globo de Oro. Otras películas que llevan su sello son El cielo protector, Tacones lejanos, Snake eyes o El renacido, lo que le permitió colaborar con directores como Bertolucci, Almodóvar o Iñárritu. Una mención especial y muy cercana a nosotros es la composición de la música para la ceremonia de apertura de los JJOO de Barcelona 1992.
«Después de despertarme empiezo a pensar, hmm, qué música voy a escuchar. A veces, por casualidad o al azar, me viene a la mente alguna música. Para mí no hay diferencia de género ni de categoría. La música es música».
Ryuichi Sakamoto
En la Biblioteca no tenemos ningún cd de este artista imprescindible y talentoso, pero sí podrás escuchar su música en algunas de sus películas en dvd: Feliz Navidad Mr Lawrence, Snake eyes, Women without men, Mumbai diaries, El último emperador y El cielo protector.