Las grandes bandas sonoras nos han acompañado desde que vimos en las pantallas nuestras primeras películas. Todos tenemos en mente nuestras bandas sonoras favoritas y, por defecto, a nuestros compositores favoritos. Qué mejor día que hoy, 21 de junio, Día Internacional de la Música, para preguntarnos todos cuál sería nuestro preferido ¿Podría ser Ennio Morricone, con El bueno, el feo y el malo, La misión o Cinema Paradiso? ¿Vangelis con Blade Runner, Carros de fuego o 1492: La conquista del paraíso? ¿O bien Hans Zimmer con Gladiator, El caballero oscuro u Origen? La lista de posibilidades, tanto de más películas de dichos compositores como de muchos otros, sería prácticamente interminable.
¿Podría ser John Williams? Quien con Tiburón dio banda sonora a nuestros miedos más profundos de nadar lejos de la orilla; que en la saga de Star Wars nos llevó con su música a través de una galaxia muy muy lejana para luchar contra el Imperio; que nos hizo viajar a lo largo del mundo para compartir aventuras con el Doctor Jones; que nos transportó a mundos perdidos y recuperados en Parque Jurásico; que nos mostró en La lista de Schindler cómo en lo más profundo del Horror aún queda lugar para la esperanza; que nos recordó en Encuentros en la tercera fase que la música es un lenguaje verdaderamente universal; y que nos enseñó que los dos extraterrestres más famosos de la Historia del Cine –E.T. y Supermán– resultaron también ser más humanos que los propios humanos.
Y para terminar os dejamos con la música de un clásico en una de las escenas más famosas de la Historia del Cine. Feliz Día de la Música para todos, y buen fin de semana.
Por Nacho Larrea, bibliotecario de la UC3M.