Me gustaría recomendar a todo el mundo las que, desde mi humilde punto de vista, son unas de las mejores obras de ficción televisiva que se han hecho: The Wire y Treme. Dos de las obras más exitosas de David Simon.
Brevemente, The Wire es una compleja serie policial que transcurre en la ciudad de Baltimore. La trama se desarrolla a través de las investigaciones llevadas a cabo por la policía en los barrios más marginales de la zona. Narcotráfico, contrabando y conflictos sindicales, política, sistema educativo y, por último, prensa y medios de comunicación; son los cinco pilares sobre los que se construye la trama de cada una de sus cinco temporadas.
Por otro lado, Treme trata sobre la vida de varias personas en la ciudad de Nueva Orleans tras el Katrina. Al igual que en The Wire, se desprende una crítica al sistema a través de las vidas de los protagonistas: abogados, profesores, músicos, policías, chefs…
Si me preguntasen por qué merece la pena ver estas series, podría contar infinidad de curiosidades que he leído o que mis profesores me han contado en clase y que las hacen particulares. Curiosidades sobre la carrera de David Simon, la metodología del trabajo bien hecho, la elección de actores, detalles de dirección… que te hacen apreciar la magnitud del trabajo en estas obras.
Ambas series, a través del reparto coral, ofrecen un retrato muy aproximado a la realidad de estas dos ciudades. Esto es posible gracias a todo el trabajo de documentación previo del equipo. En el caso de The Wire, el creador (David Simon), como periodista, pasó un año investigando el departamento de policía y los casos de contrabando para escribir uno de sus libros. Esto permitió a Simon conocer la realidad de los barrios más marginales y plasmarla en la pantalla de diversas formas: desde detalles en la vestimenta hasta el argot más oscuro que se empleaba en las esquinas de Baltimore.
Por otro lado, ambas series cuentan con algunos actores sacados de la vida real. En The Wire algunos delincuentes de las calles y en Treme músicos del barrio, entre otros. No hay nadie mejor para retratar la realidad que alguien que la ha vivido en primera persona.
La lista de curiosidades sobre las series podría alargarse considerablemente, pero para terminar me gustaría hacer alusión a un aspecto por el que tengo especial debilidad: el tratamiento del sonido.
The Wire ha sido alabada por su mezcla de sonido y por el uso de la música diegética. (Por música diegética se conoce a la música que emana de una fuente sonora reconocible en la historia, es decir, una música que “está sonando en la trama”. Es distinto de la música extradiegética, la cual se añade como acompañamiento de la imagen pero no tiene nada que ver con la historia.)
Ya en The Wire hacen que predomine casi al 100% la música diegética, lo cual suma puntos al realismo que se desprende de la serie.
En Treme, el uso exclusivo de la música diegética es un deleite para el espectador. Nueva Orleans en general y el barrio del Treme en particular, son unas zonas con una vasta tradición musical, la cual, como no es de extrañar, queda plasmada en la serie. Así, llegan a construir una riquísima banda sonora, que aunque pueda resultar sorprendente, se consigue exclusivamente a través de la música diegética y unos encabalgados de sonido que nos hacen disfrutar durante unos segundos más de la banda sonora. Música que emana de radios, actuaciones en directo, desfiles del Mardi Gras, músicos callejeros, etc.
Por éstas y muchas otras razones, las cuales animo a todo el mundo a descubrir, Treme y The Wire son dos series imprescindibles que están a vuestra disposición en la Biblioteca.
Penélope Ara Arellano (alumna de la UC3M)
Dos obras maestras con la firma de un genio.