La soledad del corredor de fondo
El domingo 23 de marzo se celebró la XVI edición de la primaveral carrera Intercampus que organiza la Universidad Carlos III. ¿Qué es lo que lleva a más de 2000 personas a inscribirse en esta carrera de 10 km?
Las respuestas son miles, casi tantas como participantes. Cada uno corre por diferentes motivos: superación personal, mejorar la calidad de vida, hacer amigos, contribuir a un proyecto solidario…
Cada persona te contará su experiencia, a veces difícil de transmitir. Quizás el cine pueda ayudarnos a tener una visión de lo que se siente al correr y participar en una carrera.
En la Biblioteca podéis encontrar películas cuyos personajes, por un motivo u otro, han tenido que “ponerse a correr”: desde la épica deportiva de Carros de fuego, con su magnífica banda sonora a cargo de Vangelis, a la conmovedora historia sobre el poder de la amistad entre dos corredores en el entorno bélico de Gallipoli…
… pasando por el retrato social de la Inglaterra de los 60 a través de un adolescente internado en un reformatorio que alivia sus frustraciones corriendo en La soledad del corredor de fondo, película de gran fuerza lírica del Free Cinema británico, de la que también tenéis la novela en la Biblioteca…
…o Marathon Man, thriller protagonizado por un Dustin Hoffman que entrena en su tiempo libre para correr la maratón de Nueva York y es perseguido por un antiguo nazi encarnado por Laurence Olivier.
Y no nos olvidamos del maravilloso Buster Keaton en El colegial, con quien se identificarán los que se dedican al deporte sin mucho éxito, sólo para conseguir la atención de la chica que les gusta.
Aunque los que de verdad han tenido que “ponerse a correr” son los personajes de algunas escenas de películas que se nos han quedado grabadas en la memoria.
¿Quién no recuerda a Cary Grant corriendo sin despeinarse en Con la muerte en los talones?
¿A Indiana Jones escapando de una bola gigante en En busca del arca perdida o a Tom Cruise en el final de La tapadera? E incluso hay gente que un día empieza a correr y ya no para, como Forrest Gump.
Terminaremos diciendo que participar en la Intercampus nos hace sentirnos a todos ganadores. ¡Gran carrera a todos los participantes!